Mañana 29 de setiembre es el Día Mundial del Corazón y a menudo se mencionan las enfermedades que afectan a este órgano vital como las primeras en la lista de causantes de la muerte de miles de personas.
Sin embargo, con un cambio de mirada, se puede incluir en la ecuación que los hábitos y condiciones que predisponen la aparición de enfermedades del corazón son desconocidas para gran parte de la población o están mal atendidas, explica un reconocido cardiólogo argentino.
“Los principales factores de riesgo son la hipertensión, el tabaquismo y el colesterol alto. Aunque el tabaquismo ha disminuido, la hipertensión y el colesterol alto están mal controlados. Para ilustrar, entre el 40% y el 50% de las personas con hipertensión desconocen su condición y, aproximadamente, solo entre 1 de cada 4 hipertensos tienen una presión adecuadamente controlada. Existe un profundo desconocimiento en la población y el tratamiento es insuficiente entre los que sí lo conocen”, advierte el Dr. Pablo Rodríguez, médico especialista en Cardiología (M.N 75816) y jefe de la Sección Hipertensión Arterial del ICBA (Instituto Cardiovascular de Buenos Aires).
De acuerdo con cifras de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), en 2019 las enfermedades cardiovasculares causaron 153 defunciones cada 100.000 habitantes en Argentina.
¿Y por qué son tan habituales los tratamientos insuficientes en nuestro país?
Para el doctor Rodríguez, existen dos factores para que esto se dé así. “El primero es la falta de adherencia a tratamientos crónicos, algo que ocurre a nivel mundial. Las personas, en algún momento, dejan de tomar la medicación. Se ha demostrado que, al cabo de un año, el 50% o no toma la medicación o la toma incorrectamente."
El segundo problema es, según el médico, "lo que se conoce como ´inercia médica o terapéutica´. Los médicos tratan de manera insuficiente, es decir, con tratamientos que no alcanzan para controlar a los pacientes. Por ejemplo, todas las guías internacionales indican que la mayoría de los hipertensos deben tomar 2 o más fármacos. Sin embargo, un estudio realizado por el Dr. Pablo Lamelas comprobó que en Latinoamérica más del 55% de los hipertensos recibe una sola droga. En Argentina, este porcentaje aumenta a más del 70%. Es decir, no reciben el tratamiento que indican todas las guías internacionales y nacionales”, explica el cardiólogo.
Advierte que otra arista importante para entender la prevalencia de las enfermedades del corazón es la socioeconómica: “Está demostrado que en los países de menores recursos hay una mayor tasa de enfermedades cardiovasculares y de defunción por estas que en los países que están en una mejor situación. Además, la educación es otro factor relevante. Los grupos con un nivel de educación más bajo tienen una mayor tasa de prevalencia de patologías cardiovasculares”.
Rodríguez también sostiene que existe una tendencia reciente y preocupante a nivel mundial. “Había una tendencia a la baja en cuanto a las enfermedades cardiovasculares. Sin embargo, en los últimos dos o tres años se empezó a ver una curva con forma de J donde comienzan a subir los casos de patologías cardiovasculares. Esto es multifactorial, pero una de las hipótesis que se maneja es que este aumento tiene una relación muy marcada con el incremento de la obesidad en la población mundial. La obesidad puede llevar a condiciones como la hipertensión y la diabetes, que a su vez pueden aumentar el riesgo de enfermedad cardiovascular”, concluye.