Cuando pasan los festejos de Año Nuevo y comimos muchas cosas ricas, tomamos alcohol, por ejemplo, habitualmente nos sentimos más hinchados, en el peor de los casos con algún síntoma digestivo o cefalea. Las comidas que habitualmente se eligen para festejar suelen ser menos digeribles que las que consumimos habitualmente, y las bebidas alcohólicas siempre suponen un trabajo extra para el hígado. Incluso los riñones pueden registrar la deshidratación que causa el alcohol y retener líquidos en el cuerpo.
En la semana posterior a Año Nuevo, podemos ayudar a nuestro organismo a recuperar su ritmo habitual consumiendo a lo largo del día o simplemente en ayunas alguno de estos licuados, que tienen sustancias desintoxicantes, diuréticas, minerales y vitaminas antioxidantes.
Licuado de apio, manzana y limón
Sus propiedades:
La manzana contiene ácido málico que ayuda a limpiar el hígado del exceso de grasas y el apio cointiene apigenina, un detoxificante celular y protector renal.
Cómo hacerlo: Poner en la licuadora 1 manzana verde pelada y cortada en cubos, 1 blanco de apio y 2-3 cdas. de jugo de limón, con 1 vaso de agua. Triturar hasta que se vea una mezcla integrada. Beber en el momento.
Para mayor poder diurético: añadir 4-5 hojitas de perejil fresco
Licuado de remolacha, zanahoria y naranja
Sus propiedades: La remolacha es rica en betaína, que nos permite mejorar la secreción de jugos gástricos y absorber mejor el hierro y la vitamina B12. La zanahoria aporta betacarotenos que son antioxidantes
Como hacerlo: Pelar una remolacha y una zanahoria medianas, y rallarlas en crudo. Colocarlas en el vaso de la licuadora con la pulpa sin semilla de una naranja y un vaso de agua. Licuar por 1 minuto para que se desmenucen las verduras y beber de inmediato.