El 21 de enero se celebra el Día Mundial del Perro de Trabajo, una fecha que busca reconocer y honrar a los perros que realizan tareas importantes para las personas. Estos animales son entrenados para ayudar en diversas funciones y áreas esenciales. Por eso, este día visibiliza su valiosa contribución y fomenta el respeto y cuidado hacia ellos.
Los perros de trabajo desempeñan roles esenciales en la sociedad, dado que ayudan en una gran variedad de áreas incluyendo la salud mental y emocional, el rescate, la seguridad pública, y la asistencia a personas con discapacidad.
La relación entre los humanos y los perros de trabajo es más apreciada que nunca, y el entrenamiento de perros sigue evolucionando para adaptarse a nuevas necesidades y desafíos. Estos perros son seleccionados por su inteligencia, habilidades, temperamento y por su capacidad de realizar actividades específicas con gran eficiencia y precisión.
Una de las formas en que estos perros pueden ser de gran ayuda a los seres humanos es en el acompañamiento. Se comenzó a usar para niños y en personas con discapacidades visuales, pero hoy ya se extiende a personas adultas que lo necesiten, ya que facilita la recuperación de todo tipo de patologías físicas y emocionales.
Un ejemplo argentino
En nuestro país, la Residencia Los Pinos utiliza canoterapia en adultos mayores mediante la visita de animalitos entrenados, de las razas Schnauzers Miniatura y Boyeros de Berna pertenecientes a la Fundación Caral. Carmen Pérsico, de la residencia, explica:
"La canoterapia es una intervención dirigida hacia un objetivo específico como parte integral de un proceso de mejora de la calidad de vida, mediante la interacción entre el animal, la y el terapeuta o experto. Es un trabajo interdisciplinario en donde se fijan metas y objetivos específicos para cada individuo. Siempre se comienza generando un vínculo entre el animal y el paciente. Las áreas de trabajo son: físicas, cognitivas, mentales, emocionales y educativas”.
Para lograr esto, se trabaja planificando las actividades con diferentes objetivos utilizando elementos recreativos como cepillos, túneles, pelotas, aros, música, conos, cintas, bancos, entre otros. Así, los perros logran poner a las personas en situación de atención, de intercambio, de conexión con otro ser, desde una manera empática desde ambos lados, ya sea porque los animales entienden perfectamente la condición de vulnerabilidad o fragilidad y porque ambos tienen algo para dar y mucho por recibir.
Los beneficios de la canoterapia
La visita de un perro puede reducir la ansiedad, los síntomas depresivos, y provocar remanencias positivas en los pacientes. Entre sus beneficios, explica Carmen Pérsico, se encuentran:
Disminución del estrés y la ansiedad, incluyendo el trastorno de estrés postraumático.
Disminución de la depresión, de sentimientos de soledad y aislamiento y las conductas agresivas.
Aumento de la socialización con un enfoque hacia el exterior, incluyendo oportunidades para la risa y un sentido de placer y bienestar.
Estimula la percepción, la memoria y el lenguaje.
Disminución de la hormona del estrés, cortisol.
Incremento de hormonas asociadas con la salud y el bienestar.
Mejora de las habilidades motoras, incluyendo equilibrio de pie, motricidad fina y otras habilidades físicas.