AYUDA FAMILIAS

Claves para armar la habitación para el bebé que está por venir: el ejemplo de Jimena Barón

Preparar el cuarto del nuevo integrante de la familia es un momento emocionante y significativo. Las posibilidades variarán según las familias, pero lo importante es crear un espacio amoroso y seguro.

Créditos: Redes sociales
Escrito en SALUD el

A mediados de junio, en un video que publicó en sus redes, Jimena Barón mostró cómo quedó el espacio que reacondicionó junto a su pareja, Matías Palleiro para recibir a su segundi hijo. El resultado encantó a sus fans y muchos se preguntaron qué características debe tener la habitación ideal. Cada familia tiene realidades distintas y según donde vivan o sus posibilidades económicas podrán contar con diferentes espacios. Al principio los recién nacidos no necesitan contar con una habitación propia ya que pueden dormir con sus papas, pero con el tiempo necesitan contar con una habitación confortable que además segura.

Jimena Barón mostró en sus redes cómo fue preparando el cuarto de su bebé (Instagram)

El cuarto del bebé debe ser cómodo y práctico, para él y para los papás ya que será el lugar donde habrá que cambiarle el pañal, mecerlo, darle el pecho o vestirlo. Además debe ser estimulante para favorecer su desarrollo y aprendizaje y seguro para evitar desafortunados accidentes.

Al momento de armar la habitación, en la medida de lo posible hay que asegurarse que reciba buena luz natural. En el caso de que su habitación no sea muy grande, si le da una buena cantidad de luz hará que parezca más espaciosa y amplia. Debe contar con una ventilación óptima, que sea lo más silencioso posible y que la temperatura ronde entre los 20 y 22 grados.

La habitación debe ser práctica, cómoda y segura (Instagram)

Una vez elegido el espacio habrá que pintarlo. En los primeros años se suelen aconsejar los tonos neutros porque transmiten armonía y serenidad (beige, habano, verde claro, gris claro). A los dos años se pueden incorporar colores más fuertes que estimulan la creatividad. Al momento de comprar la pintura son preferibles las opciones al agua, no tóxicas y lavables. Si la opción es empapelar habrá que tener en cuenta que sea lavable, especialmente para cuando comience a garabetear. Los vinilos decorativos que aportan un toque original a la habitación.

Para la iluminación hay que aprovechar al máximo los rayos de sol que entran por las ventanas, por eso las cortinas deben ser translúcidas y en tonos claros. Es preferible evitar los tubos fluorescentes y las lámparas halógenas. Es importante contar con una lámpara auxiliar que proporcione luz tenue e indirecta. Así, se podrá llegar hasta el bebé y atenderlo sin confundirle con una estimulación visual excesiva lo que ayudará a regularizar sus hábitos de sueño. En cuanto a la instalación eléctrica, hay que tener sumo cuidado de que no quede ningún cable al alcance del bebé y que estén siempre fijados a la pared. Los enchufes deben contar con protectores.

Las cunas no deben tener una distancia segura entre los barrotes (Instagram)

Para el piso, lo fundamental es la seguridad y limpieza ya que cuando el bebé empiece a gatear y luego a andar estará en permanente contacto con el piso. Las alfombras textiles es mejor descartarlas, porque acumulan ácaros. Si creés que son una buena alternativa porque evitan golpes lo mejor es buscar las de espuma o los pisos de Goma Eva. Es importante que se trate de un material resistente y duradero pero también blando, seguro y fácil de limpiar.

Al elegir los muebles, lo mejor son las maderas macizas con acabados naturales y evitar los aglomerados y los barnices. La ropa de cama como las cortinas y las alfombras deberían ser de fibras naturales como el algodón para evitar alergias. También hay que tener en cuenta que sean fácilmente lavables.

Un espacio para cambiar los pañales al bebé suele brindar comodidad y seguridad (Instagram)

Durante el primer año no se precisan muchos muebles ya que alcanza con una cuna, una cómoda o armario para la ropa y, si hay espacio suficiente, un mueble cambiador.  Las cunas colecho son una muy buena opción, ya que están pensadas para que el bebé pueda dormir al lado de la madre. Este tipo de cunas cuentan con un sistema de sujeción que les permite adaptarse a la cama de los adultos y de esta forma se hace más sencilla la lactancia materna y la atención nocturna. 

Muchas familias eligen las cunas funcionales que vienen con cajonera y cambiador y que cuando los chicos crecen se convierten en cama. Para las primeras semanas, algunas familias prefieren que el bebé duerma en un moisés. Los recién nacidos descansan mejor en espacios de menor tamaño, ya que están acostumbrados al vientre materno. Con el tiempo al mobiliario se le sumarán los espacios de guardado para los juguetes, una mesa con sillas o una pequeña biblioteca.

La habitación debe estar bien iluminada y con una cuidadosa ventilación (Instagram)

Al armar el cuarto del bebé es importante tener en cuenta no solo la estética y la funcionalidad, también la seguridad del bebé. Es fundamental que los elementos elegidos sean de fácil limpieza y desinfección y que el mobiliario tenga puntas redondeadas para evitar posibles accidentes.

Aunque no hay un momento fijo y específico muchas mamás coinciden en que el quinto mes de embarazo es una fecha ideal para armar el cuarto. Es en el segundo trimestre que se sienten con más energía, las molestias del primer trimestre se pasaron y la panza todavía permite moverse sin problemas. No siempre es posible terminar con la tarea antes de que el bebé nazca. En ese caso no habrá que angustiarse. Es muy probable que las primeras semanas el bebé duerma en el mismo cuarto que sus papás. Lo realmente importante no es dónde duerme sino crear un ambiente amoroso y acogedor que refleje el cariño y la felicidad que se siente con la llegada del nuevo integrante de la familia.