Por historia, Gran Hermano tiene la particularidad de que se forman parejas. Relaciones que comienzan adentro de la casa y que trascienden afuera. En la edición que se está viendo actualmente en Telefe teníamos a Maxi y Juliana. Hubo sorpresa porque la pareja se formó rápidamente (en la primera semana), casi sin conocerse. Más allá de eso, parecían el uno para el otro, pero no.
El viernes 11 se conoció el fin luego de una frase que le dijo ella al cordobés: “¿Le contaste al Cone que nosotros no estamos más juntos?”, le dijo, haciendo referencia a Alexis, que lo apodan Conejo. “No, no hablé con nadie”, le respondió. Pero tras esa conversación, el joven decidió ir a buscar a Agustín para darle detalles sobre la decisión.
Hasta ahí no había muchos datos, pero gracias a la conversación se supo que él fue quien le puso punto final al noviazgo. Algo que parecía evidente, ya que tras ese paso, a Juli se la vio algo triste, como desilusionada. Incluso, en varios pasajes la mostraron tirada en su cama, llorando, abrazando la foto de su hermano fallecido.
En un momento, su interlocutor quiso saber qué había pasado, y le respondió: “Tiene cosas que ya he vivido y no tengo ganas de repetirlas. Parece que estoy viendo el inicio de mi relación más tóxica”, comenzó con su explicación sobre el motivo principal que lo llevó a romper con el romance.
Lejos de terminar ahí, siguió y le dijo que fue por ella, por su manera de ser: “Sobre todo, porque es muy sensible. Un día se va a sentir medio bajón y otro todo bien. Quiero que tengamos una linda relación porque la quiero un montón”, indicó.