QUÉ MOMENTO

Soledad Aquino apareció en 'Canta Conmigo Ahora' y Marcelo Tinelli la sorprendió con una propuesta que desencadenó un jugoso pase de factura

La mamá de Mica y Cande estuvo en el programa y se prestó a un juego desopilante con el conductor del ciclo.

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La relación de Marcelo Tinelli y Soledad Aquino es un ejemplo claro de que en la vida todo pasa, se acomoda y que una historia que terminó mal, se puede construir desde otro lugar.

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A 29 años de la separación, que no se dio en el mejor de los términos, el conductor y la mamá de Cande y Mica son grandes amigos y se tienen un cariño especial. Tal es así que el año pasado, cuando ella atravesó un momento crítico de salud y estuvo al borde de la muerte, el conductor estuvo al pie del cañón para acompañarla y ayudar en todo lo que fuera necesario.

Este martes, Soledad Aquino fue al estudio de 'Canta Conmigo ahora' para ver el programa en vivo, como una espectadora más y Tinelli no quiso dejar de mencionarla. "Ha venido Sole, mi ex y mamá de Cande... un día tiene que venir como jurado, ha sido cantante y bailarina flamenca", anunció el conductor al tiempo que miraba a su hija y le proponía: "tenés que invitarla a mamá".

El diálogo que se dio a continuación fue desopilante:

Tinelli: por favor, invitela a mamá para que cante un día.

Cande: me muero si viene mamá. Que se siente al lado mío, así chusmeamos todo. Ella sabe mucho.

Sole: ¿Quién te dice?

Cande: mamá es picante...

Tinelli: sí. La conozco (risas) Me lo tira como si no la conociera.

Sole: yo te quería decir una cosa... me acuerdo cuando me cantabas en el sanatorio... no sé cómo no te echaron las enfermeras.

Tinelli: esto es tremendo.

La historia de amor de Soledad Aquino y Marcelo se remonta al a los años 80. Se conocieron trabajando, porque ella era productora del ciclo 'Badía y compañía' en el que Marcelo hacía una participación. Se enamoraron y en 1986 se casaron. De esta unión nacieron Micaela y Candelaria, las hijas mayores del conductor.

En 1993, cuando él estaba en uno de los mejores momentos de su carrera, se separaron. Años más tarde, Soledad confesó que él fue quien le dijo que había dejado de amarla y que ella se deprimió mucho por eso. La bronca, el enojo, los reproches duraron algún tiempo pero con los años, todo eso se evaporó y quedó el cariño incondicional.