Julieta de Gran Hermano quedó en el ojo de la tormenta luego de sus polémicas declaraciones sobre una de sus mascotas. “¿Ya se habrá muerto?”, se preguntó y cuando le consultaron a quién se refería dijo que tiene una perra ciega a la que no quiere. Inmediatamente la acusaron de maltrato animal y proteccionista pusieron el grito en el cielo.
Fue tanto lo que se generó, que su mamá tuvo que salir a aclarar algunas cosas. A través de sus redes sociales, comenzó: “Maltrato animal es otra cosa”. El detalle es que lo hizo con un canche sobre su falda, como dejando en claro que la familia ama a los animales, o algo así.
Julieta había dicho que no la quiere porque es “rara”, y que se pone toda dura cuando alguien la quiere hacer upa. A raíz de eso, la señora contó: “Mía es una perra que es distinta a lo que es el resto de nuestras perras porque de repente no es tan apática o no es juguetona. Nunca lo fue. Es una perra que siempre fue muy solitaria. De hecho, nuestros otros perros nunca juegan con ella porque es más tranquila”.
“Ella decide dormir sola y no con el resto. Pero nunca dejamos de cuidar a Mía. Mía tiene todos los cuidados que tienen nuestros otros perros porque nosotros los amamos. Tiene sus vacunas, su alimentación sana”, dijo Patricia y se preguntó: “¿Qué entienden ustedes por maltrato animal?”.
Consulta que ella misma contestó: “Maltrato animal sería si Julieta hubiese dicho 'uh, yo no quiero tanto a Mía como a Roma o Ciro y entonces la dejo sola encerrada en un cuarto y no le doy comida o le pongo una gomita en el hocico para que no ladre o no la sacamos a pasear. Eso es maltrato animal”, cerró.