Juan Reverditto fue el cuarto eliminado de Gran Hermano. El taxista fue uno de los primeros en salir por la puerta grande y creyó que le lloverían los trabajos tras haber estado en el reality más famoso de la Argentina, pero no fue tan así.
Cuando estuvo la posibilidad de volver a entrar en el repechaje, Juan hizo su campaña en redes sociales y en la vía pública para que la gente le diera una segunda oportunidad. Al obtener muy pocos votos, se quedó fuera de juego una vez más y desde ahí, comenzó a escalar la bronca contra la producción del programa.
"Estoy con bronca porque quisiera estar adentro y no acá. Es muy fuerte verlo de afuera. Tengo mucha bronca porque quería jugar al juego del auto. Por eso entré a Gran Hermano, pero bueno, estoy intentando aprovechar todo y esperando si aparece un trabajito o algo. Queremos hacer presencias. Me muero con que me llamen para hacer una obra de teatro pero voy aprovechando todo, hasta la mínima oportunidad. Agarro todo. Todo suma", expresó meses atrás junto a Martina, la segunda eliminada del reality.
La semana pasada, con el ingreso de Alfa a la casa, Juan volvió a estallar y su enojo creció mucho más: "No coincido con esta decisión pero, lo que pasa, es que hace un mes que la casa es un bodrio. Hay otros chicos que están afuera que le podrían poner más picante que Alfa. Yo no vivo de Alfa, a todos no nos dejan ir a los pisos de los programas y a él sí, tiene privilegios. Hay cosas que te generan bronca, en el debate hay por lo menos tres ex GH que no suman nada”.
Ahora, el taxista fue letal a la hora de referirse a los productores de Gran Hermano, con quienes no quedó una buena relación: "No pienso que haya fraude pero sí sostengo que inflan algunos participantes. Y en los debates cuando quieren sacar a alguien o perjudicar a un participante con los tapes lo hacen, y se termina yendo esa persona el domingo".
"¿Qué pasó en tus redes que te quejaste y decías que los primeros eliminados quedaron en el olvido y que no te llamaron más? ¿Alguien te respondió o se contactó con vos?", le preguntó Estefi Berardi en Mañanísima. "Sí. Yo pedí mucho tiempo ir a los debates y me dijeron que estaba la grilla ocupada de esa semana y que tenía que seguir esperando. Hace 10 días me dijeron que yo quedé en el tiempo y que tampoco me iban a poner una alfombra roja para ir", fue la fuerte respuesta de Reverdito.
"Estoy enojado porque no me tienen en cuenta y yo creo que más allá de que haya jugado mal, me considero parte de Gran Hermano por más de que estuve un mes nada más. Hay gente que salió de la casa antes que yo y siguen estando en los debates. Esto le dije a los productores y me parece que les cayó mal. Creo que por más de que haya un contrato firmado, si uno no puede decir lo que siente, estamos en el horno", agregó.
Luego, hizo una fuerte denuncia contra el reality: "Yo sé que a todos los participantes no les piden lo mismo, a algunos los dejan que hagan lo que quieran. Entonces yo no me voy a callar. Mi bronca pasa porque me dejaron de lado tanto en los debates y no puedo hacer nada. Por ejemplo, yo quisiera ir al piso de ustedes ahora y no puedo. Hay participantes que recorren todos los programas. Creo que tendría que ser la misma vara para todos. El contrato es por dos años pero sé que hay una cláusula que dice que cuando termine Gran Hermano, te podés desvincular. Ahí voy a estar libre".
Por último, reveló qué actitud lo hizo explotar del todo: "Hice una publicidad que hice unos mangos. Se acordaron después de 3 meses que existía y me parece medio desubicado. Mi respuesta fue 'hace 3 meses que no se comunican conmigo y necesito pagar mis cosas y mantener a mis hijos'. Después de 3 meses que me manden un mensaje me pareció cualquiera".