Rodrigo comenzó el último desafío de MasterChef con el pie derecho ya que, a primera vista, su sopa se veía espectacular. "¡Ay, qué moderno! Te escucho", lo felicitó Damián Betular al ver el emplatado.
Haciendo su presentación, el participante explicó: "Es una sopa de mijo con langostinos, hongos y una galleta de mijo con garbanzos".
"Qué nivel hoy, ¿no?", insistió el pastelero. Luego de esto, Donato de Santis fue el primero en animarse a probar la preparación. "Realmente es una buena idea. Entrega sabores inéditos", celebró el cocinero.
Finalmente, Germán Maritegui tomó una cucharada de sopa y sorprendió a todos con su picante crítica: "Es una buena idea, tiene una buena presentación. Estéticamente sorprende y también te prepara para algo espectacular. Pero después, cuando pruebo la sopa, no tiene gusto a nada. El puerro es como masticar la manija de una canasta de mimbre".
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