Parece haber pasado el susto para Jorge Rial luego del episodio que vivió en Colombia. Para algún desprevenido, fue a una clínica con fuertes dolores en el pecho, ya en el nosocomio tuvo un paro cardíaco y lo tuvieron que reanimar. Esto 10 minutos muertos y hasta mostró las pruebas, para aquellos que no le creían.
Ya en Argentina, todo volvió a la normalidad. La relación con su hija Morena Rial sigue tirante. Si bien ella viajó a tierras colombianas, ya de regreso, se volvió a alejar de su padre. Remarcó que no tienen vínculo, aunque sí Francesco, su hijo, que no perdió nunca el contacto con su abuelo.
Este miércoles 31, la mediática pasó por LAM y en un momento de la entrevista, Nazarena Vélez quiso saber si Rial cambió hábitos luego del problema de salud. “Te soy sincera, no te sabría decir. Estoy un poco distanciada de él”, comenzó su respuesta. Agregó que fue desde que llego de Colombia. Contó que tenía pensando regresar con él, pero el periodista le pidió que se vuelva, que él lo iba a hacer en un avión sanitario, como finalmente sucedió. Desde entonces no se vieron más.
“Estamos siempre a los tiros, pero no pasa nada, ya va a pasar”, dijo y agregó: “No me peleé en Colombia, pero hay cosas que a mí no me gustan y otras que a él no le gustan, y no nos vamos a llevar bien en ese sentido”.
Cuando Yanina Latorre quiso saber un poco más sobre eso puntual, le contestó: “Vivimos peleando. En mi vida amorosa ya no se mete más desde que él decía ‘si, si, si’ y yo ‘no, no, no’…yo me haga cargo de mis cagadas.
Por otro lado, se refirió a sus continuos viajes a Córdoba, donde prácticamente vive. Allá tiene amistades que aquellos que conocen en profundidad su entorno remarcan que no son buenas influencias para ella. Sobre esto, se sinceró: “A él no le gusta que yo vaya a Córdoba, ese es un gran problema, porque yo amo Córdoba, entonces nos vamos a pelear siempre”.
Continuando con los cortocircuitos, una de las peores épocas -según ella- fue cuando Jorge estuvo en pareja con Agustina Kämpfer, entre 2015 y 2017. Fue en ese momento en el que se fue de la casa familiar para nunca más regresar. Incluso, eso la llevó a instalarse en tierras cordobesas. “Me fui de mi casa a los 17 años por culpa de la Kämpfer”, confesó.
Ahondando en el tema, siguió: “Me fui porque me echó. Hubo un problemita. Me echó mi papá por defenderla a ella porque yo no la saludaba porque no me la bancaba”. “Después el tiempo me dio la razón... malas vibras”, comentó, pero no quiso decir cuál fue el tema puntual aduciendo que sería un escándalo si lo saca a la luz.