En Los 8 Escalones, donde entregan 3 millones de pesos en cada programa, siempre hay participantes que tienen historias que contar. Este fue el caso de María Soledad del Amor, una vidente, numeróloga y médium que contó parte de su trabajo y su experiencia paranormal en el más allá.
Cuando Guido Kaczka le consultó a qué se dedicaba, la mujer respondió: "Soy vidente y médium". Con un poco de susto, el conductor preguntó tímidamente: "O sea que hablás con...". "Con los muertos, sí. Y sé de la vida de las personas sin que me cuenten nada", aseguró la participante antes de que el presentador termine su oración, asombrando a todos los presentes.
Ante esta historia, Guido fue al corte y al regresar, con titubeo, recordó la profesión de la muchacha: "María Soledad, que dijo que es vidente, médium, bueno, que sabe la vida de las personas que tiene alrededor".
Luego, del Amor se sinceró al hablar sobre su trabajo y explicó cómo funciona: "Bueno, a ver, si me tirás una fecha te hablo de tu vida, si alguien me tira su fecha de nacimiento puedo hablar de la vida de la persona. Soy numeróloga también, consteladora familiar".
"En realidad es este mismo plano, lo que pasa es que tenemos…A ver, si están acá es porque están en este plano, pasa que no están en este plano físico", argumentó con respecto a las personas muertas con las que habla.
Continuando con su fundamento, profundizó: "Nuestra alma ocupa en el físico, en nuestro cuerpo, pero cuando el alma se desprende del físico pasa a ser un espíritu, entonces sí. Pero después tenemos otros tipos, están los que están arriba, los que están más arriba, los que se portaron un poquito mal y están abajo".
"Tuve la suerte, por así decirlo, de haberme muerto en esta vida, y de haber vuelto, y viste cuando te dicen vi la luz, sí. Estaba en terapia intensiva", confesó la participante sobre su experiencia de haber esta muerta por unos instantes.
"¿Y la luz blanca?", preguntó Guido. Contestando su pregunta, María Soledad reveló: "No fue una luz blanca. Fue un campo hermoso, muy pero muy lindo, en el cual estaba muy feliz y muy en paz. De hecho, no quería volver, mi mamá decía que yo no quería volver", concluyó en su estremecedora historia.