En el 2010, Toto Kirzer y su papá Adrián Suar emprendieron un viaje de película a África que les dejó un montón de divertidas anécdotas.
"Mi papá me cumplió uno de mis mayores sueños, que era ir a África. La locación se llamaba Singita, queda en Sudáfrica, cerca de la sabana africana. Sólo hay selva ahí, no hay nada. Resulta que el desayuno era en un lugar que estaba como en el medio de la selva con un montón de copas de árboles que se caían", comenzó en el ciclo Mi primo es así.
"En un momento, de la nada, en una mesa atrás mío caen dos monos y empiezan a agarrarse todo lo que había. Había una pareja de ingleses que estaba horrorizada. Le sacaban la billetera, los relojes, la comida. Yo me río y mi viejo me dice: 'Nos vamos a la cabaña, está situación no me gusta'", continuó.
El actor señaló que, mientras caminaban, surgió un imprevisto: "Nos fuimos solos, que nos habían dicho que no se podía. Diez minutos después se nos aparece toda la familia de monos pero había uno que estaba de pésimo humor y me empezó a agarrar el pantalón. Sacadísimo. Mi viejo ve la situación, se saca el sweater color verde lima y de la nada hace 'yaaaa' (revolea la prenda). Hubo un ida y vuelta que duró treinta segundos. Nos empezamos a alejar".
"El truco del sweater funcionó hasta que aparece el macho alfa, ahí mi viejo ve la situación y dice: 'Te voy a dar igual que a tus amigos'. Ahí mi viejo revolea el sweater otra vez y el mono se lo saca. Mi papá me mira y me dice: 'Corré'. Yo de fondo sentía un 'ay, por favor, sueltenme'. Llego a la cabaña, me pongo a llorar dos minutos y de la nada, en el medio de la selva, escucho a mi viejo gritar", siguió Toto.
Sobre el mal momento, el actor sumó: "Ahí lo veo a mi viejo corriendo todo chivado, todo rojo, llorando, moqueando y, por supuesto, con el sweater que lo había recuperado. Yo me emociono, me paro y grito: '¡¡¡Papá!!!'. Y mi papá dice 'nos vamos'. Se empieza a hiperventilar".
"Ese fue el puntapié inicial para que ya después nos quedáramos en un hotel, nos divertimos, fuimos a todos los safaris, nos persiguió un elefante y fue de los mejores viajes que hice en mi vida y le agradezco a mi papá por haberme salvado y por haberse sacrificado", concluyó con humor.
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