"En los informes, me agarran y me hacen mierd... a ellos. Pero mirá cuándo les pasa a ellos... no dicen nada". Palabras más, palabras menos, esas fueron las palabras que Gustavo López dijo en su programa de radio haciendo referencia al escándalo de Tamara Pettinato.
El periodista deportivo ya se había quejado en el pasado porque a su entender, el ciclo de Beto Casella 'lo tenía de punto' y armaba informes en su contra con bastante frecuencia. Ese reclamo cayó bastante mal en el conductor que aprovechó su paso por el stream de Ángel de Brito para pasar factura: "La verdad, cuando me comentaron que él nos había criticado, dije que se hacía la víctima para que lo levanten... en chiste. Después vi que se había quejado porque lo teníamos de punto y se burló de lo que nos pasaba... me dio a oscurín...", disparó.
Casella aclaró que se ocupó personalmente de consultar a la producción cuántas veces se habían armado informes suyos y al parecer, no habían sido tanto. "Dos o tres... Uno de cuando se enojó porque los jugadores les daban más notas a los influencers que a los periodistas y otros dos porque le pegaban a él algunos colegas. Después, en el piso, siempre lo defendimos", dijo molesto.
Pero Gustavo López escuchó a Beto y decidió bajar el tono de la pelea: "Me criticaron muy fuerte, sobre todo Beto a quien admiro. No me gusta verme en televisión por eso la paso mal cuando estoy en los informes. Walter Quejeiro, que es amigo, me manda mensaje para decirme que iban informes míos. Una vez, dos veces, tres... no digo nada. Pero llega un punto que cansa... hablo de los informes, no de lo que dicen en piso".