Todo comenzó después de que Fede Bal y Soledad Bayona bailaran juntos las canciones más conocidas de Elvis Presley durante la ronda de homenajes.
"No me subestimes porque sé ver. Una de las cosas que sé es ver. A mí no me importa si el homenaje es emotivo o no emotivo. Si me gusta algo, me gusta. No importa si me hacés llorar, pusiste a un muerto… La verdad, no me importa", le había dicho Flavio Mendoza en su devolución.
La parte que generó más conflicto fue cuando el productor teatral lo tildara de "estar gordo": "Creo que el problema del caballero es que tiene diez kilos arriba".
Por su parte, Fede decidió responderle al jurado a través de una conversación con La Once Diez/Radio: "En las obras de Flavio están acostumbrados a los abdominales marcados, los cuerpos marcados y los pelos teñidos. Los que van a venir a ver mi obra es otra cosa, una comedia de la vida real, con cuerpos reales”.
"Siempre estuvo en contra mío, pero anoche exploté", concluyó sincero el actor.