Hábil declarante, Angel De Brito sabe qué contar y cómo hacerlo. Así lo hace todos los días en su programa de El Trece Los ángeles de la mañana y en El espectador, que conduce por CNN Radio. Pero no solamente habla en sus ciclos sino que también lo hace cuando algún colega lo invita a participar como entrevistado en otros medios. Días atrás Angel charló con La Barby y Pampito Perelló en Soy tan biutiful, que sale los sábados de 22 a 24 por FM Pop 101.5
En un clima distendido y de amigos -De Brito trabajó con La Barby y Pampito en el magazine BDV-, se fueron relajando en la conversación y terminaron contando anécdotas desopilantes. En especial, llamó la atención una que tiene como protagonistas a Mirtha Legrand, Marina Calabró y Mariano Iúdica. "Resulta que fuimos al carnaval de San Luis y la pasamos espectacular. Volvimos deshechos, a las 3 de la mañana al hotel y estaba lleno de famosos: Andrea Rincón, Gustavo Bermúdez, Marina Calabró, Toti Pasman, El Tirri, Mariano Iúdica, ¡todos! Nos quedamos todos en el hotel, ya defenestrados, ¿y qué es lo peor que te puede pasar cuando llegás al hotel, ya deshecho, para ir a dormir? ¡Encontrarte a Mirtha Legrand! Ella estaba a las 3 de la mañana impecable, en una mesa, como si estuviese haciendo su programa", comenzó relatando Angel.
"¿Qué hacía despierta a esa hora? ¡Charlaba!", reveló el periodista de espectáculos y continuó: "Mirtha, entonces, nos pidió que nos sentemos en su mesa pero la cosa no termina ahí. "Chicos, siéntense un ratito a tomar algo´, nos dijo. Nos pedía chimentos, nosotros le contábamos cosas del carnaval que se había perdido y ella tiraba muchas maldades". Fue entonces que Pampito le pidió, al menos, una. "Te puedo tirar dos -prosiguió De Brito-. En eso, iba llegando gente y ella los iba incorporando en la mesa, como si fuera el programa de verdad. En un momento, llegó Marina Calabró, la humilló y le dijo: ´Usted es muy mala conmigo, usted me odia, porque dijo tal y tal cosa´".
"´No, señora´, le decía Marina. ¡Pero no hubo forma! Y al rato llega Iúdica y si bien no lo humilló, le dijo: ´Querido, no grite tanto´. Hable más bajito y le empezó a decir cosas venenosas, hasta que Iúdica se fue", contó el conductor de LAM. ¿Si Calabró se quedó o se retiró? "No, Calabró creo que se hundió en la baldosa. Mirtha tiene una mirada láser que te hace sentir humillado", remató Angel. Y antes de cerrar la historia, detalló su huida de la mesa. "Nuestro problema era cómo levantarnos e irnos, sin que ella se ofendiera. Por suerte, nos levantamos con honra y ya no recuerdo cómo nos escapamos, pero tardamos en hacerlo. Nosotros nos fuimos y ella se quedó, obvio. ¡Debe estar ahí todavía!", cerró.