Tras varios meses de silencio mediático, la conflictiva separación de Julieta Prandi volvió a dar que hablar. El viernes pasado, su ex decidió cortar antes de lo previsto su tiempo con Mateo y Rocco y los dejó en la puerta de la casa de la modelo cuando ella estaba trabajando. Este episodio derivó en una denuncia formal que la modelo presentó en la comisaría y en la oficina de violencia contra la mujer pero la lucha sigue.
"No voy a poder recuperar todo lo que me sacó. Yo trabajo desde los 15 años y se llevó todos mis ahorros entonces voy a seguir luchando por recuperar lo que pueda y trata de lograr que si no paga los alimentos, no pueda ver a sus hijos", dijo indignada en 'Hay que ver'.
Pero lo más duro de su relato fue el momento en que admitió que de vez en cuando, teme por su propia vida. "¿Si tengo miedo que me haga algo? Sí, lo puedo barajar entre las opciones porque él me amenazaba de muerte. Tengo cámaras, vigilancia, alarma, una garita, pido que revisen mi casa antes que yo llegue... no puedo vivir así".
"Estoy muy cansada, estoy harta y sobrepasada. Aunque fallen a su favor, no me voy a quedar callada", agregó.
En su relato, explicó que Contardi no sólo adeuda alimentos sino que también se niega a pagar otras cosas que resultan necesarias para sus hijos. "El juez dijo que llevaramos a mi hijo a terapia y la paguemos entre los dos. Él jamás lo hizo, me ha llamado el psicólogo para decirme que él no dejó paga la sesión. Me da mucha vergüenza tener que decir esto pero es lo que me pasa".
Por último, apuntó contra el sistema judicial: "Las mediaciones son a los gritos... él empieza a mentir, a decir cosas que no son, a chicanearme. Lo dice con soberbia, con impunidad y en los juzgados le permiten moverse con libertad y zafar de todas las situaciones".