La lista es extensa y llena de primeros actores: Gerardo Romano, Nacha Guevara, Pablo Rago, Virginia Lago, Betiana Blum, Rodolfo Ranni, Alejandro Fiore, María Valenzuela, Roly Serrano, Gustavo Garzón, Vanesa González, Arturo Bonín, Mario Alarcón, Magui Bravi, Rodrigo Guirao Díaz, Rodrigo Noya, Toti Ciliberto, Alejandro Müller, Federico Barón, Florecía Otero, Gonzalo Urtizberea, Germán Tripel e Inés Palombo, entre otros. Todos ellos se unen en un proyecto artístico sin precedentes, lo cual marca un hito dentro de la historia del cine nacional: actúan en Conurbano, la nueva película de Pablo Yotich (40), que ya está lista y que se estrenará a comienzos de 2022.
Conurbano es el sexto filme de Yotich como director y como actor ya que allí también tiene un personaje. "Soy un actor que dirige, básicamente, más que un director que actúa. Para poder dirigir y actuar a la vez, cuento con dos asistentes de dirección: uno más orientado a lo técnico y otro más a la dirección de actores. Vengo trabajando con ellos hace tiempo y hoy, con la tecnología, tenemos la posibilidad de terminar una escena, verla y corregirla. Trato de tener claro lo que queremos contar a nivel narrativo y a nivel plano", cuenta a Pronto el artista.
"¿Cómo vivo la previa del estreno de Conurbano? Con mucha ansiedad. Fue un trabajo arduo, duro y la mayoría de las personas con las que hablaba me decía que era una película inviable e imposible de hacer para el cine nacional. Imaginate que encima estábamos en pandemia, ¡parecía más imposible que nunca! El mismo Gerardo Romano me preguntó: ´¿Vos creés que vamos a poder hacerlo? No lo vamos a poder lograr´. Fueron muchísimas escenas, con la pandemia de por medio y le dimos para adelante", se sincera Yotich.
¿Cuánto tiempo le llevó hacerla? "Fueron tres años y medio de investigación antes de comenzar a rodar y entrevistamos a los personajes que se te ocurran. Más de 300 personas y con Ale Fiore también a la cabeza porque él es parte del equipo de investigación y producción. Hicimos muchísimas entrevistas hasta lograr hacer el guión bien. Era largo y gigantesco: imaginate que el primer corte de la peli dura cuatro horas y media", reveló.
Si bien en Conurbano se cuentan distintas historias basadas en hechos reales, todas tienen un punto de contacto. "Las historias se cruzan, claro. Son todas historias reales que se unen en un punto que es un hilo conductor y que se va centrando en la historia de una familia. Ronda en torno a una madre a la que en 1976 su hijo con sus amigos le dicen que tienen un sueño y se ve frustrado por la coyuntura del conurbano bonaerense. Recorre todas las complejidades que atraviesa política y socialmente el pueblo del conurbano. Más o menos como nos pasó a nosotros con la película, todos quisieron ir detrás de ese sueño y se les fue sumando gente que también es víctima de este conurbano. Van en búsqueda de ese sueño que se devela al final", anticipó.
Si bien hoy brilla como director, a Yotich le costó mucho llegar a este lugar. ¿Qué le pasa cuando mirás para atrás? "Es cierto que me costó un montón pero igual disfruté mucho el camino. Siempre supe que me iba a dedicar a esto; siempre lo tuve en claro. Hoy quizás tengo más notoriedad porque esta película es de una gran magnitud pero antes, cuando vendía encendedores en los colectivos hasta cuando tenía una revista que escribía a mano, nunca dejé de hacer hechos artísticos. Quizás de menor transcendencia pero siempre los disfrutaba de la misma forma", reflexionó.