En las últimas horas, el Papu Gómez se convirtió en noticia tras sacudir al mundo del fútbol al conocerse que dio positivo en un control de doping. En este contexto, el mediocampista de 35 años acudió a las redes sociales para realizar un descargo en cuanto a la sanción de dos años que recibirá por la confirmación del resultado.
Tras dos días de hermetismo total, Alejandro eligió romper el silencio a través de su cuenta oficial de Instagram en el que compartió un comunicado haciendo referencia al escándalo que se desató y dio su versión de los hechos al respecto. "A raíz de las recientes noticias publicadas sobre mi persona en relación a una posible infracción reglamentaria en materia antidopaje, a continuación pongo en conocimiento de los medios de comunicación y opinión pública lo siguiente", fueron las primeras palabras que eligió el futbolista para abrir su publicación.
Así, Gómez confirmó que fue notificado de la resolución del Comité Sancionador Antidopaje de la Comisión Española para la Lucha Antidopaje en el Deporte sobre el control que protagonizó cuando aún era futbolista de Sevilla y aseguró que finalmente se acordó “la suspensión de mi licencia federativa por un periodo de dos años".
Acto seguido, el Papu se defendió y dejo en claro que él siempre busco ser profesional a la hora de jugar al fútbol: "Desde siempre, no solamente he cumplido estrictamente toda la normativa sino que me he posicionado como un férreo defensor del deporte limpio y la deportividad, condenando y rechazando categóricamente toda forma de dopaje" para luego subrayar: "Nunca he tenido ni tendré la intención de recurrir a una práctica prohibida".
Además, el mediocampista aclaró el motivo por el que dio positivo en el control de doping: "La presunta infracción tiene su origen en la presencia de Terbutalina en mi organismo de su pequeño hijo” y aseguró que ingirió el medicamento “por error y de forma accidental, involuntaria y no intencionada”. “Conviene no obstante precisar que el uso terapéutico de la Terbutalina está permitido para los deportistas profesionales y que en ningún caso mejora el rendimiento deportivo en el fútbol", remarcó a continuación.
En un video que también publicó en Instagram, el Papu manifestó: “Estoy triste y arrepentido, fue un accidente doméstico”. Luego, el deportista recordó “tuve varios controles antidoping durante el Mundial y en Sevilla, nunca pasó nada, siempre di negativo”.
“Siempre traté de ser un ejemplo dentro y fuera de la cancha. En mis 18 años de carrera pude cumplirlo. No quiero retirarme de esta manera, no quiero que termine mi carrera así, creo que no me lo merezco. Lo que más deseo es volver a las canchas, entrenar con mis compañeros y jugar con Monza. Acá, dándole batalla, voy a seguir entrenando solo. Ojalá que mis abogados y allegados puedan solucionar el tema", explicó el argentino.