La magia de la televisión tiene, justamente, ese detrás de escena que hace que el televidente se imagine algo que tal vez no sucede tal y como te lo muestran. La gracia es que quedé ahí, para no romper ciertos códigos. Sobre todo cuando hay publicidad en el medio, como sucede en Gran Hermano, por ejemplo.
Sucede que Juliana, ya exparticipante del reality, hizo justamente eso: contar algo que no debía. En una charla con Martín Cirio terminó ventilando que una de las escenas que se repite cuando hay un eliminado, en realidad, no se lleva adelante tal y como lo cuenta Santiago del Moro. Fue cuando le preguntó por el procedimiento una vez que un participante queda afuera.
Parece que eso que cuenta el conductor, que lo suben al eliminado a un auto de la empresa de transporte que es auspiciante, y que por eso hay que esperar el recorrido, no es tan así. “Te suben a una combi y después hacen el simulacro”, empezó. En ese momento comenzó a reírse de nervios, al darse cuenta de que había metido la pata.
Ya metida en el tema, y sabiendo que lo que estaba diciendo no era lo correcto, no le quedó más remedio que seguir por el mismo camino, pero pidió disculpas, por las dudas: “Lo estaba diciendo y lo estaba pensando... bueno, es parte del show. Pasa que no es tan cerca la casa. Perdón a la produ”.
Esta no es la primera vez que Juliana saca a la luz detalles que no debería. En su momento, tras quedar eliminada, tuvo la oportunidad de regresar a través del repechaje. Sin embargo, la expulsaron porque no paró de contar secretos del afuera. La advirtieron varias veces y lo siguió haciendo. Llegó un momento en el que se dudó si lo hacía a propósito o sin realmente es ingenua.