En Ariel en su salsa, el magazine de cocina de los mediodías de Telefe, además de cocinar platos riquísimos, suceden muchas otras cosas y se desprenden declaraciones inesperadas de los integrantes del ciclo. Algo así sucedió esta mañana, cuando una charla informal derivó en la confesión menos esperada de Ariel Rodríguez Palacios, el conductor del exitoso programa.
Todo se desató cuando Rodríguez Palacios le hizo una humorada al productor Fernando Colombo, quien hace unos días se puso botox en la cara y cambió su expresión por una más fresca. Mica Viciconte y Nico Peralta, los panelistas del ciclo, le dijeron a Ariel que siguiera los pasos de Colombo pero el reconocido cocinero respondió: "Puedo llegar a cambiar de opinión pero decidí aceptar con grandeza el paso del tiempo".
"Que venga lo que venga y chau. Pero es probable que después me arrepienta y vaya", agregó. En eso, Peralta lanzó la pregunta de rigor: "¿Hasta ahora no te hiciste ningún retoquecito estético?". Ahí, surgió la confesión menos esperada. "Tengo que confesar que hace diez años... Nidia, te mando un beso grande", arrancó y mandó al frente a su mamá, Nidia.
Mientras cocinaba unas magdalenas bañadas en chocolate, continuó: "Mi madre es muy estética, súper coqueta. Entonces, cuando te saluda, te da un beso, te abraza y te dice: ´Tendrías que ponerte algo acá, en las patas de gallo´. Te mira la cara y te sugiere retoques. Entonces, hace diez años me convenció y me inyecté bótox en la cara".
¿Cómo continuó la anécdota? Ariel la relató así: "Me fui de viaje y a los 15 días parecía un muñeco, todo duro. Después se me fue porque se reabsorbe pero... Bueno, creo que me había quedado bien. La persona amiga de mi madre me lo había hecho bien pero ya está, lo hice y nunca más".
"Si ahora alguien viene y me dice: ´Çhe, Palacios, hacete algo que estás hecho bolsa, ya está, no lo haré de nuevo. Acepto el paso del tiempo. Es lo que hay y punto", reflexionó el conductor culinario. Y Peralta acotó: "Está bien, son las líneas de expresión de la vida". Sincero, Ariel cerró: "Sí, hay que aceptarlo y listo".