El 27 de agosto La Luna tuvo su fase inicial, de Luna Nueva, bajo el signo de Virgo. Todo lo relacionado con la salud y el cuidado de nuestro bienestar, así como el de otros, toma máximo protagonismo. Escuchar las señales que nuestro cuerpo nos envía acerca de malestares antiguos y nuevos es esencial para aprovechar este período.
Virgo es el signo de la sabiduría interna, de aquello que nace de nuestro más profundo ser. Cuando nos adentramos e investigamos con serenidad aquello que nos está sucediendo, nos detenemos a observar esas señales que nuestro cuerpo nos está enviando todo el tiempo pero por las vicisitudes de la vida cotidiana no podemos percibir, obtenemos valiosa información. Dolores, molestias y desequilibrios pueden tomar un nuevo significado y prestar atención a ellos nos ayuda a proteger nuestra salud, antes de que debamos recurrir a urgencias o tratamientos más agresivos.
A menudo, las malas dietas o los hábitos nocivos nos van erosionando nuestro estado de salud. La Luna Nueva en Virgo nos ayuda a reflexionar, e incluso a escuchar nuestra intuición, sobre aquello que debemos cambiar para sentirnos mejor.
El trabajo, el servicio que prestamos a los demás, la seguridad, todo debe entrar en esta búsqueda. Revisar aquello que hacemos sin pensar necesita una nueva mirada. Hay mucho que podemos hacer por mejorar nuestro bienestar, con solo cambiar pequeños hábitos, por ejemplo, incorporar más actividad física, consumir alimentos que nos nutran de verdad o bajar el nivel de estrés.
La perspectiva espiritual no debe estar ausente. Si nos sentimos tristes o desganados, faltos de optimismo, debemos pensar qué es mejor para cambiar esa situación, recurriendo a la ayuda de nuestra propia fuerza interna. Nos llama a dejar que nuestros pies se hundan en la tierra y a recordarnos lo fácil que es la vida cuando nuestro flujo está armonizado con las estaciones de nuestra vida. ¿Qué nos dice esta etapa que estamos transitando? ¿Debemos acelerar o disminuir el ritmo, descansar o trabajar más o darle a determinadas actividades más o menos espacio en nuestra agenda cotidiana?
Utiliza la energía de la lunación que se aproxima para abrazar la realidad y volver a la Tierra.
Marte está muy activo en esta Luna. Podríamos sentirnos irritables a veces y sentir que nos asaltan inseguridades y miedos. Notarnos más intolerantes y frustrarnos con mayor facilidad. Sin embargo, una vez que seamos conscientes de ello, podemos intentar ser más compasivos con nosotros mismos y con todos los que nos rodean.
Estas emociones desagradables se despiertan con la energía de Marte cuando albergamos inseguridades y miedos no resueltos que no nos permiten expresar nuestra verdad.
Si sentimos que nuestra irritación aumenta, debemos preguntarnos por su origen. Además, debemos tener mucho cuidado de no lanzarla contra las personas que no la merecen. Por lo menos, la energía de Marte es útil para la actividad física. Así que puedes reorganizar o hacer una limpieza exhaustiva de tus espacios vitales, desde tu cuerpo a tu casa, tu lugar de trabajo o estudio.