Lo más llamativo de las nominaciones de los Oscars 2021 probablemente es que Mank sea por escándalo la favorita y la que más nominaciones consiguió. Se esperaba que estuviera nominada a Mejor película y Mejor dirección, pero no que compitiera en 10 categorías dejando relegadas bastante lejos a las segundas que obtuvieron 6.
La peli es de David Fincher, director de joyitas como Zodiac, The Game, Seven, Fight Club y Gone Girl. Uno de los mejores de su área. Basada en un guión de su padre Jack, David contó la historia de Herman J. Mankiewicz, guionista de Citizen Kane, una de las mejores películas de la historia -no diré que es la mejor por no entrar en discusiones-.
¿Pero qué es lo que hace diferente a esta película que podés ver actualmente en Netflix? Acá te tiramos algunas puntas:
1. Una mirada peculiar del Hollywood clásico
Así como Quentin Tarantino expuso su punto de vista del Hollywood de las películas clásicas en Érase una vez en Hollywood, Fincher usó la historia de Mankiewicz como excusa para hacer lo mismo con lo que él cree que fue la industria del cine en sus años de gloria. Política ácida, peleas entre creativos, ambiciones de los productores y varios aspectos más son "analizadas" con un sinfín de referencias cinéfilas por un experto de ojo hábil para poner la cámara y pluma incisiva a la hora de hacer hablar a sus personajes.
2. Los guiños a Citizen Kane
Si sos de esos o de esas que defienden a rajatabla el opus magnum de Orson Welles esta película no te va a defraudar. Hay breves momentos en los que Fincher dedica a recordar aquella película del '41 y eso vale reconocerlo.
3. La actuación de Gary Oldman
El actor de Drácula, El perfecto asesino y decenas de hits más no suele fallar y esta no es la excepción. Con una caracterización increíble, el casi siempre intenso intérprete se asienta a la perfección con el que habría sido carácter del guionista, maneja matices y entrega pruebas contundentes de que es un tremendo camaleón.
4. Un regalo a los puristas del sonido
Para que su película se viera como una de los '40, Fincher y el equipo de sonido trabajaron con un método especial de construcción sonora que hace que el film se escuche distinto a otros, como con una falsa rotura.