El talento es sin duda una de las condiciones básicas para cantar en el escenario de "La Voz" y lograr que el jurado se de vuelta. Pero a veces, eso termina quedando en un segundo plano, ya que las historias que cada uno de los concursantes trae es mucho más fuerte que la potencia de su voz.
Este fue el caso de Germán Giordano, un hombre de 47 años oriundo de Mataderos que deslumbró a todos con su interpretación de 'Piedra y Camino', de Mercedes Sosa. Al momento de elegir equipo, se quedó con la Sole y se quebró. La cantante quiso saber qué había detrás de sus lágrimas y él no dudó en compartir su historia.
"Hace unos años tuve una operación muy delicada en la cual estuve sin latidos en el quirófano. No podía hablar, no podía cantar que es mi amor y a fuerza de voluntad, con mis amigos, mi familia y mi pareja... acá estoy", introdujo y agregó: "Doy todo lo que puedo dar. Con la máquina rota pero con el corazón fuerte".