Alfa es uno de los participantes más explosivos de Gran Hermano. El hombre de 60 años es querido a partes igualesy odiado a partes iguales por el resto de los participantes dentro de la casa. Sus actitudes sacan de quicio a algunos y hacen reír a otros, pero la gran mayoría se divierte mucho con sus anécdotas y sus ocurrencias.
Un tiempo atrás, Walter contó una anécdota que involucró a Moria Casán. Según el empresario, la diva lo había invitado a su casa a tomar un café y le habría dicho "bomboncito". Él, por lo que contó, la habría rechazado.
Pero a la exvedette no le gustó nada esto y salió a desmentirlo en sus redes sociales: "Me impresiona cada vez más mi fama. No califica que conteste a un chabón encerrado con chaboncitos que quieren fama, con un estereotipo de bana…, sarazero, cholulo perdido, demodé, con jean nevado, bra… que le comienza casi en la garganta y bandana que le debe aplastar su mono neurona, ja. Que gane Alfa que es vintage mal. Consiguió lo que quería, que hablásemos de él, me nombrás, te colgás y yo te doy un pase hermoso para que un día te sientas importante".
En las últimas horas, Alfa también contó que conoció a Juan Manuel Fangio y que este le dio consejos sobre autos. Pero como si esto fuera poco, no solo asegura conocer a varios famosos sino que hasta sueña con ellos. En una charla con Maxi, Walter le contó el extraño sueño que tuvo con dos actores argentinos.
"Soñé que en la casa estaba Gonzalo Heredia y el tipo estaba en pareja con Araceli González. Ambos estaban acá y yo no tenía calzoncillos y estaba en pelo... Yo dije 'le voy a afanar un calzoncillo, si este debe tener un montón', y ahí me meto en la habitación de él con una toalla, a revolver... Ellos estaban en otra habitación", comenzó contando ante la atenta mirada del cordobés.
Y agregó: "Encuentro un calzoncillo con una marca arriba y digo 'yo me llevo este'. Ahí se traban todas las puertas y empieza a sonar una alarma. Aparecen los de seguridad y aparece Gonzalo Heredia y me dice '¿qué hacés acá?'. Yo le digo 'No, hermano, tranquilo. Vine a sacarte un calzoncillo nada más y el tipo empieza a buscar entre la ropa y le digo 'no te toqué nada, te juro'".
"Ahí viene Araceli González y le digo también 'te juro que no toqué nada. Quería un calzoncillo nada más'. Estaba toda la gente mirándome y Gonzalo Heredia me dijo 'no te podés llevar mis calzoncillos'. Yo miraba y tenían todo un vestidor para ellos, lleno de ropa. Le dije 'pero tenés un montón, es un calzoncillo nada más'. Yo lloraba y le repetía 'no me hagás quilombo, es un calzoncillo nada más'", finalizó, entre risas.