La casa de Gran Hermano está que arde. Los participantes quieren llegar a la gran final y a pesar de que casi todos están en la placa de nominados, harán lo que sea para lograrlo. En juego no solo está el premio de los 15 millones de pesos y la casa, sino también la fama posterior a cuando el ganador cruce la puerta de la casa.
En la última semana, hubo un clima muy tenso entre Julieta, Romina y Camila. La exdiputada y la modelo cruzaron a la pianista y aseguraron que es muy falsa. La buena onda que existía entre ellas 3 se evaporó y no hay vuelta atrás.
Durante la gala de eliminación, Gran Hermano les dio la posibilidad a los hermanitos de tener un minuto en el confesionario para dirigirse a su público y pedirles su apoyo. La primera en hablar fue Camila, quien expresó: "Siento que debo quedarme porque lo que ven es lo que soy. Soy alegre, divertida, optimista y transparente. Soy esto, esta es mi esencia. Desde que llegué a la casa siempre jugué mi juego qie es ser la mejor versión de Cami Lattanzio sin hablar mal de nadie, destruir un grupo o destruir a mis compañeros y aportar mi alegría siempre tirando para arriba. Vieron todas mis facetas. Me vieron feliz, me vieron triste, enojada, con mi locura máxima y siempre acompañada de la música. Mi plan desde que llegué es demostrarle a ustedes que a pesar de que te tiren mier... y te quieran apagar, siempre va a haber un rayo de luz".
"Más que nada quiero agradecerle a todos porque siento que disfruté muchísimo todo este tiempo acá. Pasé momentos increíbles y conocí gente increíble. Estuve en situaciones que me pusieron mucho a prueba y aprendí muchísimo de mí mismo. Creo que la mejor recompensa que uno puede tener acá es el amor que ustedes nos hacen llegar. Quiero agradecerles y decirles que si por alguna razon quieren que me quede en la casa, me apoyen hoy. Decirles que muchas gracias, que sin ustedes nada de esto hubiese sido posible. Siempre voy a estar agradecido con ustedes", fueron las cálidas palabras de Marcos.
Por otro lado, Romina, fue muy escueta: "Quiero agradecerles a mis hijas y a mi familia por apoyarme, a mis compañeros, a toda la gente que no me conoce y que me apoyó hasta acá. Si no fuera por ustedes no sería posible que yo estuviera acá. Solo tengo palabras de agradecidimiento. Un beso a toda la tribuna que debe estar alentando y apoyando. Gracias por acompañarme, muchas gracias".
Y por último Julieta dio un mensaje esperanzador: "Hoy la voy a hacer cortita porque siento que todo lo que tenga para decir, ya lo saben. Porque siento que despues de 5 meses ya me conocen, ya saben la intención con la que hice las cosas. Me vieron en todos mis estados, contenta, sin maquillaje. La vida es una y Gran Hermano también es uno. No me quedé con las ganas de todo, jugué, lo di todo. Siempre seguí mi corazón y mi mente, me dejé llevar por mi camino sin que nadie me ponga nada en la cabeza. No me quiero conformar con 'todo pasó por algo' porque siento que me lo merezco. Sé que está dificil pero estoy con mucha fe y eso es lo importante".
En vivo, Santiago Del Moro se metió en la casa y les comunicó a los hermanitos quién es el primer salvado de la placa: "Quien sigue en competencia por decisión del público... Quien va al cuarto y desarma la valija porque continúa en la casa más famosa del mundo es Marcos". El salteño continúa en carrera a la final con el 0,47% de los votos.
Minutos después, el conductor volvió a ingresar para rescatar a un jugador más de la placa: "Chicas, por decisión del supremo, quien sigue en competencia y se mete entre los mejores 4 de esta nueva edición del programa más popular de todos los tiempos es Julieta". La actriz sigue en juego con el 8,99% de los votos.
Finalmente, quedó un mano a mano entre Romina y Camila. Del Moro les comunicó a las jugadores quién se quedó afuera del reality a pocos días de la final: "Quien se va esta noche de la casa es Camila". La pianista abandonó el reality con el 60,26% de los votos.
"Me voy súper contenta de conocerlos y los mayores éxitos para los 4. Les deseo lo mejor", expresó Camila, visiblemente alegre mientras tomaba su valija y abandonaba la casa.