Marcos Ginocchio se convirtió en una de las figuras más queridas de la televisión tras su paso por Gran Hermano. El joven de 22 años se mostró honesto, transparente y súper empático con sus compañeros y la gente lo admiró durante meses. A pesar de que es muy reservado, cuando salió de la casa se animó a contar varias cosas de su vida, entre ellas, la depresión que sufrió cuando tenía 14 años.
Ahora, el Primo visitó el programa de Georgina Barbarossa y allí se sinceró: "Sentí que no podía salir, que cada vez que trataba de dar un paso, volvía a caer. Una noche llegué llorando desconsolado y dije 'Dios por favor ayudame, no sé que querés de mí. Si no estoy con vos, si no me ayudás, no voy a poder hacer nada'. Desde ese día todos los pasos que daba fueron para arriba".
Por otro lado, habló de Carola, su madre, y todo lo que ella hizo para ayudarlo: "Mi mamá cuando íbamos al colegio se quedaba en el auto 7 horas y nos esperaba. Ella lo disfrutaba. Leía, bordaba, hacía manualidades... Siempre estaba contenta con eso. Su vida éramos nosotros tres. Todas las cosas que hacía eran por y para nosotros. Ahora como soy más grande me doy cuenta de todas las cosas que dejó de hacer por nosotros y lo valoro tanto".
"Con mi mamá tenemos una relación súper linda, tenemos mucha confianza. Le cuento todo lo que me pasa y ella me cuenta todo lo que le pasa. Es muy lindo", agregó el salteño. "¿Cuándo se separaron tus padres, te quedaste con tu mamá o con tu papá?", quiso saber la conductora. "Con mi mamá", respondió Marcos.
Por último, habló también de su vínculo con su padre: "Con mi papá la relación es como con mi mamá. Admiro tanto cómo es él como persona. No es tan tranquilo como mi mamá, habla más, se expone más, le gusta hablar con todos... Es tan dulce, una persona tan transparente".