Dejando atrás sus días en Buenos Aires, Wanda Nara viajó de regreso a Estambul para reencontrarse con sus cinco hijos y de allí, visitar Londres. Pero, después de pasar unos días en la capital inglesa, la mediática dejó a sus hijos varones con su papá, Maxi López, y emprendió viaje a París con Francesca e Isabella, las dos pequeñas que tuvo con Mauro Icardi.
En plena separación, la empresaria que acostumbra a compartir todo tipo de momentos a través de sus redes sociales, se mostró celebrando Halloween durante el fin de semana entre brujas, calabazas y paisajes tenebrosos. Luego, se grabó mientras se realizaba un tratamiento corporal de belleza con tecnología láser, y por supuesto visitando restaurantes de capital francesa.
En este contexto, y prácticamente a la par de las historias que publicaba Wanda, Estefi Berardi compartió contenido de la rubia paseando durante el día por la calles de París: "Wanda al mediodía paseando por París, iba con Kennys", escribió la angelita en una foto donde se ve que una fanática frenó a Wanda para pedirle una foto.
Hasta el momento todo parecía ir bien, hasta que en una siguiente historia de Instagram, Berardi reveló una sorpresiva reacción que tuvo Wanda frente a esto: "A los fans que le pedían foto les decía que sólo Selfie", informó la panelista de LAM en sus redes, mediante una 'autofoto' de la fanática junto a Wanda.
Se trata de una llamativa condición por parte de la mediática hacia sus admiradores, que si bien es una práctica muy asociada a las redes sociales, también es muy relacionada a una percepción visual de uno mismo poco concreta o real.