El fin de semana, Rocío Marengo recibió la dura noticia de que el primer tratamiento de fertilidad que realizó no había dado el resultado esperado. "No hay bebé en camino", contó a sus seguidores que inmediatamente le hicieron llegar sus muestras de apoyo y cariño.
Ya más recuperada anímicamente, Rocío habló con Andrea Taboada y le confió: "Fue una piña en la cara porque había sido todo tan lindo, lo viví con tanta felicidad, seguridad y orgullo... todo había fluido... bueno, son cosas que pasan. Está dentro de las posibilidades. Hay que seguir intentando".
La modelo tomó este año la decisión de convertirse en mamá de manera unilateral y aunque no dio demasiadas explicaciones de las razones por las que Eduardo Fort, su novio durante los últimos 8 años, estaba fuera del proyecto, aseguró que estaba muy feliz con su decisión.
En sus redes sociales, fue mostrando las distintas etapas del tratamiento hasta que tuvo que contar que esta vez, no había podido ser. "Lo quise hacer público de una porque si se llegaba a filtrar antes de que yo dijera nada, me iba a caer recontra mal. Preferí enfrentar la situación, supongo que hablarán y ya está. No me hubiese gustado que se filtrara algo tan personal", le dijo a Taboada.
Luego cerró: "La gente ya sabía del tratamiento, muchos me preguntaban qué había pasado, si tenía novedades... me sentí en la obligación de contarlo. También incluso desde el amor que recibí, quería devolverles el cariño que me hicieron llegar. Mal momento total pero hay que volver a intentarlo".