Durante la jornada del martes 25, Luciana Salazar recibió una noticia más que importante en el litigio que tiene con Martín Redrado. Sucede que tras una nueva incursión por los juzgados, finalmente logró que la Justicia fallara a su favor y le embargara una de las cuentas al economista. Esto seguirá así hasta que no se ponga al día con las 10 cuotas por alimento que le debe por la mantención de Matilda.
Claro, acá las preguntas se multiplican. Ellos dicen que la menor no es hija de Martín, pero resulta extraño que lo hagan pagar una cuota como su lo fuera. Por lo pronto, lejos de aclarar el tema, ambos siguen mirando para un costado.
Tal vez tenga que ver con un estilo que mantenían desde que se conocía, ya que en su momento, el abogado Mauricio D’Alessandro contó que él le pagaba una mensualidad por ser su pareja. Tal vez acá hay una cuestión similar, pero la verdad es que ellos no aclaran nada sobre la cuestión que mantiene en vilo a un país por lo raro que es todo.
Ante el revés judicial, la atención estuvo en qué determinación mediática iba a tomar. Y, de alguna manera, un posteo en Instagram generó suspicacias. No fueron pocos que lo vieron como una indirecta a lo que está viendo, justamente, con lo explicado más arriba, que se tiene que ser cargo de una cuota como si fuera el padre.
¿De qué se trata? Mostró una taza. “Lindo regalo de mis hijos para arrancar con todo cada día”. Lo que generó comentarios fue el momento en el que se la dieron y, además, la frase que se lee en ella: “Super dad” (súper papá, la traducción del inglés).