El pasado lunes, un supuesto hacker ingresó a la cuenta de Instagram de Wanda Nara y, entre otras cosas, dio a conocer algunos de los chats privados de la empresaria.
Si bien las conversaciones que más llamaron la atención fueron las que la mujer de Mauro Icardi tuvo con la China Suárez, hubo otra que no pasó desapercibida.
¿De qué se trata? El hacker mostró que el jugador de River Esequiel Barco había reaccionado a varias fotos de Wanda y que le había enviado emojis de fueguitos y corazones.
A su vez, en el chat, también podía observarse que la empresaria jamás correspondió a estos piropos y halagos.
Tras haber quedado súper expuesto, Barco decidió llamarse a silencio y así lo detalló el periodista Juan Etchegoyen en Mitre Live: “Son más personas las que no creen en esta versión del hackeo que las que creen en esta historia y hoy le envíe un mensaje a Esequiel Barco después de los chats que salieron a la luz”.
"Esequiel Barco me clavó el visto literal, prefirió no hablar de este tema, imagino yo que por ahí está asesorándose con sus abogados y con el club River Plate en una semana muy importante por el superclásico. Quizás le aconsejaron desde su entorno a no dar ningún tipo de declaraciones”, agregó.
Finalmente, a modo de reflexión, el periodista cerró: “Obviamente que también llamó la atención la conversación que se filtró de Wanda con la China Suárez. Imagínense los daños colaterales que se ha generado con estos chats que ha expuesto a la actriz y también al jugador de River que prefiere no dar declaraciones”.
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